Imaginemos que tenemos una discapacidad importante… Que la ataxia nos ha dejado en silla de ruedas. Que tenemos 45 años y la degeneración muscular es máxima… Imaginemos que vivimos en casa, al cuidado de nuestros padres y con su ayuda para sobrevivir…
Pero un día, irremediablemente, llega el momento en el que nuestros padres ya no nos pueden ayudar, o ya no están con nosotros…
¿A dónde vamos?¿Quién nos atenderá…?
¿Saben cuántas residencias existen en Canarias, que atiendan a personas con discapacidad, que se han quedado solas?
…, mejor no saberlo…
Canarias. Paraíso. Turismo. Hoteles de muchas estrellas…
Pero también Canarias del blanco y negro. De la soledad y el abandono a las personas con discapacidad…
Políticas de igualdad… ¡Qué chiste!
Discapacidad política… ¡Qué triste!
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