En una encuesta realizada por la ULL dentro del marco del programa LIFE Garachico, la población trabajadora del municipio se muestra “preocupada” por los daños generados por este fenómeno y en general creen que las viviendas se encuentran mejor preparadas que los negocios locales
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El municipio norteño de Garachico ha aceptado que tendrá que convivir sine díe con los fenómenos costeros adversos como el fuerte oleaje o las inundaciones provocados por el mar de leva. Así se desprende de una encuesta realizada por la Universidad de La Laguna en el ámbito del proyecto LIFE Garachico, que busca establecer una metodología para adaptarse a los efectos derivados del cambio climático contando con la participación ciudadana. Mientras que el 94% cree que la situación de la zona no va a cambiar, el 87% de las personas encuestadas ha reconocido que debe preocuparse “tanto a corto como a largo plazo”, ya que cuentan con experiencias previas negativas, bien sea porque se han visto afectados por las olas (23%), tormentas (16%) o inundaciones derivadas de los fenómenos costeros adversos (12%). Las dificultades se manifiestan principalmente en la afluencia del tráfico rodado, con un 50% de afección, y en la alteración de la actividad laboral y educativa, con un 21%.
Precisamente, las cuestiones relativas al desarrollo socioeconómico son aquellas que más inquietan, puesto que en no pocas ocasiones los negocios locales se han visto afectados por el temporal. En este sentido, se observa que los garachiquenses piensan que su vivienda está mejor preparada para los fenómenos costeros adversos que los negocios (73%), lo que demuestra que todavía queda mucho camino por recorrer en esta materia.
Entre las soluciones aportadas por la ciudadanía, se aboga por adoptar un sistema de alerta del riesgo de inundación costera y, en segundo lugar, llevar a cabo obras que modifiquen el paseo marítimo y las zonas de aparcamiento. En ese sentido, un 79% de la población se muestra predispuesta a que se acometan las obras necesarias para poder revertir esta situación, especialmente los habitantes del Casco, El Muelle y Santo Domingo. La población encuestada también cree que algunas soluciones a nivel personal pasan por estacionar sus vehículos lejos de la zona costera o estar más atentos a los avisos. En materia de comunicación, la población señala que tanto los medios tradicionales como las redes sociales (RRSS) son útiles a la hora de informarse frente a los episodios de mar de leva. Aunque el 41% de los residentes no se siente lo suficientemente informado acerca de los eventos meteorológicos que afectan al municipio, y muchos vecinos demandan información específica sobre el proceder durante estos episodios de inundación costera. Por todo ello, LIFE Garachico plantea mejoras en la gestión de la información y la necesidad de generar canales para llegar a segmentos concretos de la ciudadanía, como la población más joven que afirma ser menos conocedora de la situación.
El conocimiento de estos datos es de suma importancia para el consorcio de once socios que trabaja en este proyecto liderado por la Viceconsejería de Lucha contra el Cambio Climático y Transición Ecológica del Gobierno de Canarias. Estas acciones de trabajo de campo son la antesala para poder cumplir con el objetivo de poner en práctica, probar, evaluar y difundir metodologías y nuevos e innovadores enfoques participativos que incluyan a la población municipal dentro del contexto de la protección de áreas urbanas frente al riesgo de inundaciones costeras, y en el desarrollo de una estrategia de adaptación flexible de estas áreas frente al cambio climático. LIFE Garachico, que tiene un presupuesto de ejecución de 2.638.132 euros, cuenta con un 55% de financiación de la Unión Europea.
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