La gente estaba contenta y de nuevo confiaba en su futuro y en el de los suyos. La pobreza endémica y la miseria que existía en la España de principios de siglo había pasado al olvido, en menos de 3 años PUEBLO UNIDO, gobernando el timón de la nave nodriza con el apoyo del PSOE, había conseguido lo que se creía imposible conseguir. El salario básico universal de 2.800 euros/mes era una realidad, los controles realizados sobre los perceptores de esa ayuda decían que pocos eran los que se conformaban con estar en el desempleo para siempre, entre otras cosas porque la búsqueda de trabajo era una condición sine qua non para percibir la prestación. La solidaridad batía record históricos y la ejemplaridad de los políticos en nada se parecía con el pasado reciente, sus sueldos habían disminuido un 50%, se acabaron las tarjetas de crédito “multi uso” y las prebendas de asignaciones por dietas de estancias, tarjeta/taxi, las comisiones de investigación, portavoces etc. etc. etc.
El Parlamento había adquirido un hotel, en las afueras de Madrid, que estaba a disposición de los diputados que por residir fuera de Madrid necesitaban pernoctar en la capital de la villa. El restaurante y cafetería del Congreso ofrecía un menú muy interesante por precios módicos, los viajes institucionales estaban controlados por el gabinete de información y se habían acabado las escapadas de fines de semana a las Canarias, Ibiza o las Rías Baixas a comer marisco a costilla del contribuyente.
La Justicia, por primera vez en 80 años, era independiente del poder ejecutivo, las nuevas leyes las pronunciaban un comité de expertos formado por Sociólogos, Jueces, Fiscales y Abogados que a propuesta del Parlamento en la mayoría de los casos o por iniciativa popular en otras, estudiaban la Ley a imponer y la elevaban al Gobierno para su aprobación y reforma del Código correspondiente. Al mismo tiempo se había dotado de medios técnicos y humanos, siendo la mayor innovación la reforma de la Ley sobre la instrucción penal preparatoria que de ser competencia de Jueces pasaba a ser de los Fiscales, descargando y agilizando de tal forma la justicia que en menos de un año los casos más controvertidos estaban juzgados y sentenciados.
La banca estaba empezando a devolver los préstamos millonarios que se le hicieron en el año 2013, las condiciones estaban pactadas con el pago con carácter retroactivo de los intereses por aplazamiento más los de demora. Ningún Banco o Caja que hubiera recibido préstamos podría pagar dividendos por beneficios a sus accionistas hasta la liquidación total de la deuda con el Estado. Los créditos a las pymes y al consumo estaba reflotando de manera que la economía productiva se volvía a poner en marcha de forma que, con una reforma laboral ajustada a los derechos de los trabajadores y dos modalidades de contratación, una indefinida y otra pactada por obras o servicios o bien de formación profesional, la tasa de paro había bajado hasta situarse en el 1%.
La reforma de la Administración pública se estaba llevando con el consenso de todas las partes implicadas. Los Sindicatos, que ya no obtenían subvención estatal, UGT y CCOO estaban a punto de desaparecer y sus dirigentes, implicados en delitos de malversación de fondos públicos, estaban entre rejas, se mantenían a través de una cuota de sus afiliados que era descontada cada mes de sus nominas. En cuanto a la vivienda el gobierno había puesto a la venta y alquiler a precios reducidos todo el stock de pisos que figuraba en el “Banco toxico” al mismo tiempo que volvía abrir sus puertas el Banco Hipotecario y Comercial e Industrial de España, propiedad del Estado que como objetivo principal gestionaba la concesión de hipotecas y créditos a las pymes y al consumo, eliminando el antiguo y obsoleto ICO. En los 3 primeros años se solucionó el problema de la vivienda en más del 70% de la población. La sanidad pública se estaba potenciando al máximo y la gestión se estaba mejorando hasta tal punto que las listas de espera para especialidades médicas estaban reducidas a menos de una semana y las quirúrgicas no pasaban de los 15 días. La educación se estaba reformando con la implicación de padres, alumnos, profesores, psicólogos, pero la reforma que más sorprendió a todos fue la fiscal, una reforma que ha implicado la disminución del fraude en un 90% que ha beneficiado a las arcas del erario en más de 70 mil millones de euros. La deuda externa con la rebaja de la deuda “indigna” se situaba en un 30% niveles del año 1996 en lugar del 99,30% del año 2015.
En este momento con un sonoro golpe en el suelo desperté de un sueño lleno de utopía y felicidad. Me levanté y abriendo la nevera me dije que la cosa no iba nada bien, se acabaron los yogures, no había mantequilla, un solitario huevo y un batido caducado. Opte por vestirme y bajar a tomar algo al Bar de Pepe que al contarle mi sueño me dijo aquello: ¿Qué es la vida? Un frenesí. ¿Qué es la vida? Una ilusión, una sombra, una ficción y el mayor bien es pequeño: que toda la vida es sueño y los sueños, sueños son.
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