Tal y como figura en el Acuerdo, ha quedado fijado un aforo máximo del 40%, para eventos en recintos abiertos y un aforo máximo del 30% para eventos en recintos cerrados, garantizándose siempre una distancia interpersonal mínima de 1,5 metros.

La ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha destacado el amplio respaldo con el que ha contado este acuerdo que establece “un paraguas común que lanza un mensaje de unidad”; un consenso que, ha abundado, va aumentando progresivamente y al que “hay que darle su valor”.

Los asistentes a los eventos serán preferentemente personas abonadas, así como público local y los entrenamientos se realizarán preferentemente sin público y, en todo caso, con los límites del aforo máximo establecido.

El Acuerdo hace hincapié en que se reforzará la vigilancia del cumplimiento de la obligatoriedad del uso de mascarilla y el respeto a las indicaciones sanitarias. Así, no acudirán al evento deportivo las personas que presenten sintomatología compatible con COVID-19, así como aquellas que se encuentren en aislamiento o en periodo de cuarentena por contacto estrecho con un caso de COVID-19.

Consumo de comida, bebida y tabaco

Con carácter general, no se permitirá la venta ni el consumo de alimentos y bebidas durante el evento deportivo. Del mismo modo, no se permitirá el consumo de tabaco y de productos relacionados, tanto en espacios interiores como exteriores.

El Acuerdo establece asimismo la recomendación de proporcionar ventilación natural de forma permanente en interiores, y si ésta no fuera posible, se utilizará ventilación forzada con el fin de obtener una adecuada renovación de aire.

Antes de la celebración del evento deportivo se comunicarán los detalles de acceso, franjas horarias, medidas de seguridad sanitaria y condiciones de admisión.

Medidas comunes y de mínimos

Las medidas contenidas en el Acuerdo, son comunes y de mínimos para todo el país y, a primeros de septiembre se realizará una nueva evaluación de la situación.

Adicionalmente, las autoridades competentes podrán añadir otras medidas en base a la evolución de la pandemia, el impacto de las campañas de vacunación en la situación epidemiológica y cualquier nuevo conocimiento que se genere sobre el control de la transmisión de SARS-CoV-2.