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¿Realmente la cerveza te engorda?

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EBFNoticias/Comofuncionaque/Omar Morante.- Es una de las nociones de marketing más crueles: un comercial de televisión mostrando gente hermosa – en el bar, en la playa, en una azotea – bailando, coqueteando, y luciendo fabulosos y con una buena figura. Y tomando cerveza.

La idea de que una persona pueda tomar un montón de cerveza y luego mantener una buena figura física es un tropo que simplemente no morirá. Cuando se encuentra involucrada una caja de cerveza, la realidad es un poco diferente a unos abdominales marcados. ¿Pero realmente debemos echarle la culpa a la cerveza? Más precisamente, ¿Es la combinación de calorías y alcohol en la cerveza que trabajan en tu contra?

Las 150 calorías en la cerveza promedio no parecen ser tan malas, pero la mayoría de las personas no se toma solo una. Esa sola cerveza puede convertirse en dos, tres, y pare usted de contar. La entrada de alcohol también hace estragos con tu apetito. Quizás querías ordenar una ensalada, pero después de la tercera cerveza, las papas fritas suenan mucho mejor.

Si esto no fuese suficientemente malo, tu cuerpo deja de quemar grasa cuando detecta alcohol, creando un peor escenario para el aumento de peso. Cuando tomas cerveza, aproximadamente el 20% del alcohol entra en tu sangre cuando es eventualmente metabolizado en tu hígado. Una vez que tu cerebro detecta el acetato y el acetaldehído – subproductos de ese metabolismo – en tu sistema, este deja de quemar grasa y se concentra en deshacer al cuerpo de estos subproductos.

Irónicamente, también comienza a producir una clase diferente de grasa que también es un subproducto del alcohol: acetil CoA.

cerveza aumento de peso

Ya que tu cuerpo solo puede procesar una cantidad finita de alcohol por hora (15 a 30 mililitros), mientras más cerveza tomes, más grasa tu cuerpo crea de acetil CoA y más tiempo le toma en volver a quemar grasa. Por ejemplo, si tomas una cerveza que contiene 4% de alcohol (o 22.7 mililitros), pasará al menos una hora antes de que se reanude la quema de grasa.

Estas son malas noticias, especialmente para los consumidores excesivos de cerveza. Niveles hormonales “flojos” nos hacen más propensos a almacenar grasa alrededor de la cintura mientras envejecemos, y tomar cerveza puede ayudar a la causa. El mismo efecto de los “rollitos” va para aquellos que toman cerveza y también fuman cigarrillos, y ha estado asociado a una serie de problemas de salud, incluyendo diabetes tipo 2, enfermedad del corazón y alta presión sanguínea.

Los efectos de la cerveza al envejecer podría ser una de las razones del porqué la mayoría de los comerciales de cerveza parecen mostrar solo actores un poco mayores a la edad legal para tomar.

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