A veces la naturaleza se vuelve tan imponente que no hay quién le haga competencia, sin embargo, de vez en cuando, entra en duelo consigo misma y no deja que disfrutes de su belleza. Desde que partimos desde el Porís de Abona hasta que llegamos al pueblo de San Miguel de Tajao, el viento se empeñó en acompañar los pasos de la Tribu Monsecca, Un viento caprichoso que no nos permitió recrearnos la vista, ni en el mar agitado de una costa serpenteante, de playitas y calas, ni en los pueblecitos dónde se resguardan vecinos y barcas.
Lo mejor de la ruta fue que el viento nos llevó hasta la sonrisa de María Melazzi, una uruguaya afincada desde hace años en Tenerife que, por un tiempo, se ha visto obligada a abandonar botas y bastones… Ella, su energía y su buen humor aderezaron una jornada que nos sirvió para oxigenarnos, compartir experiencias y conocer nuevos compañeros como Hassan y Antonio.
Como siempre, el espíritu de Monsecca es madrugador…Desde las siete y media de la mañana en pie para partir rumbo al sur y abordar la ruta que bordea la franja costera del Porís de Abona hasta Tajao, pasando por Abades y La Jaca.
El Poris de Abona – Tajao Dificultad técnica: Moderado Tiempo: 4 horas 20 minutos http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=6449521
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