AGENCIAS.-Un grupo de activistas feministas, varias de ellas miembros del grupo Femen, han organizado una protesta durante la inauguración de una casa en homenaje a la muñeca Barbie, por considerar que se trata de un emblema sexista.
La casa alberga un exposición centrada en la famosa muñeca de Mattel y permanecerá abierta hasta el 25 de agosto. Los visitantes pueden probarse ropas de Barbie, jugar en la cocina y tocar un piano rosa, entre otras actividades.
El director ejecutivo de la empresa Event Marketing Services, organizadora de la exposición, Christoph Rahofer, ha defendido la recién inaugurada casa frente a quienes la consideran un símbolo del sexismo imperante en el sector juguetero. Rahofer ha declarado que la casa-museo está abierta para «jugar, sorprender y descubrir», puesto que «hay muchas cosas ocultas y es una exposición interactiva».
No lo ven así quienes se han manifestado este pasado jueves, incluida una activista de Femen que, semidesnuda, ha mostrado en su pecho el lema «Life in plastic is not fantastic» –la vida de plástico no es fantástica–. Además, ha prendido fuego a una muñeca atada a un crucifijo.
Una portavoz del grupo Pink Stinks (el rosa apesta, en español), Stevie Meriel Schmiedel, ha lamentado la importancia que se le da «a estar más guapa» y la «presión» que esto supone para las niñas. «Protestamos porque Barbie no sería capaz de sobrevivir con su cuerpo y todavía es un ídolo para muchas niñas, lo que no es sano», ha advertido.
«Querida Barbie, no sólo cocines magdalenas, cómetelas también», proclamaba una de las pancartas.
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