Elblogoferoz.- Agentes dela Policía Local de Santa Cruz de Tenerife intervinieron, la pasada madrugada sobre las 05:00 horas, ante un aviso de incendio en un local del polígono industrial de El Mayorazgo. La nave en cuestión albergó la antigua discoteca Mambo y en estos momentos estaba siendo desmantelada para la realización de obras.
Los primeros policías en llegar al lugar de los hechos constataron la fuerza de las llamas en el interior del inmueble, logrando abrir una de las puertas de acceso. A continuación se avisó a una dotación de bomberos para que acudiera para tratar de sofocar el fuego.
Los agentes verificaron que no había persona alguna en el interior del local, ni tampoco indicios de que fuera utilizado para pernoctar por alguien. En la antigua discoteca si había una gran cantidad de material apilado debido a la realización de obras.
Desde la Sala de Radio Control se localizó a la propietaria de este inmueble quien declaró que la nave estaba en desuso y, desde hace unas semanas, estaban desmantelándola. La mujer si aportó como dato a su denuncia la imposibilidad de que el origen del fuego fuera un cortocircuito debido a que el edificio no dispone de suministro eléctrico desde hace meses.
Robo
Por otra parte, agentes dela Policía Localde Santa Cruz de Tenerife detuvieron, el pasado jueves, a un hombre de 36 años que estaba abriendo un agujero en la pared en el interior de un garaje comunitario y, al parecer había forzado siete cuartos trasteros, un coche y dos motocicletas. El arrestado fue identificado como V.M.A.B., de 36 años de edad y según todos los indicios operaba con un cómplice que no pudo ser localizado.
La Policía Localfue avisada por un vecino del edificio en cuestión, ubicado en el barrio de El Perú, que había escuchado ruidos durante la madrugada.
Con la ayuda de este vecino los agentes entraron en el garaje, verificando previamente, que había un ciclomotor estacionado sobre la acera en el exterior del inmueble. En la inspección ocular previa se confirmó que una de las puertas del garaje presentaba signos de haber sido forzada y que el dispositivo electrónico de apertura también estaba manipulado.
Una vez dentro los agentes detectan al detenido tratando de practicar un agujero en una pared interior con una pata de cabra, golpeando violentamente el muro. El individuo portaba una amplia mochila en la que se encontraban diversas herramientas, desde una cizalla, llaves, piquetas, varios destornilladores, una maza, martillo y un cincel. Además tenía en su poder varias llaves de coche, de motocicleta, mandos electrónicos y dos cascos de moto.
Una vez detenido e identificado, se comprobó la existencia de un cómplice en estos hechos, aunque esta persona no pudo ser localizada por los agentes tras una revisión de todas las zonas comunes del garaje comunitario. Se da la circunstancia de que otra de las puertas de acceso a dicho garaje había sido manipulada y se abría automáticamente al detectar la presencia de una persona.
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