AGENCIAS.- El médico español de 58 años secuestrado desde el pasado 4 de abril en Nigeria, José Manuel Machimbarrena Corcuera, es natural de Cartagena (Murcia), y se encontraba desde 1978 en el país africano, donde compaginaba su trabajo como doctor con una labor social y humanitaria como integrante de la Niger Foundation Hospital, una iniciativa promovida por miembros del Opus Dei.
Esta Fundación, surgida en 1993, se dedica a la promoción de centros médicos en el ámbito rural de Nigeria, en poblaciones que no tienen instalaciones sanitarias, por lo que hace una labor «de ayuda a los desfavorecidos», según informaron fuentes próximas a la familia de doctor.
Las actividades de la Fundación son impulsadas por personas con un espíritu cristiano, miembros del Opus Dei, que es una institución de la Iglesia Católica que lleva trabajando desde 1965 en Nigeria.
Las mismas fuentes, que no conocen los detalles ni motivos del secuestro, han destacado la «valía personal y el compromiso social» del doctor secuestrado, quien se desplazó a Nigeria en 1978 fichado por un hospital de la capital del país promovido por personas del Opus Dei para intentar paliar el déficit de atención sanitaria.
Posteriormente, el propio Machimbarrena contribuyó a la creación de la Fundación en 1993 junto con otros miembros del Opus Dei y, desde entonces, compagina la atención de los pacientes en su consulta y la promoción de actividades educativas, de formación, de voluntariado, de higiene y de salud en las casas, enseñando a la población.
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, ha confirmado el secuestro de un español en Nigeria pero ha precisado que se trata de hecho motivados por razones económicas y no políticas ante el cual el Ministerio ha dado un pasó atrás para que dar margen a la negociación.
En los pasillos del Congreso, García Margallo ha explicado que el Gobierno ha tenido noticia del secuestro, producido en la zona sur del país, y no en la región norte, lo que abunda en la idea de que se trata de un secuestro económico en el que «al parecer no hay implicaciones políticas de ningún tipo».
Según ha publicado el diario ABC, el secuestrado sería un médico de 58 años que desempeñaba labores de asistencia sanitaria en una clínica promovida por miembros del Opus Dei en el sudeste del país, una zona mayoritariamente cristiana.
«La organización a la que pertenece (el médico) ha pedido absoluta discreción y margen de negociación en un secuestro que tiene todas las características de secuestro económico –ha insistido–. El Gobierno está actuando con la discreción que tiene que actuar».
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