ACN PRESS.-El presidente de la Confederación Canaria de Empresarios, Sebastián Grisaleña, critica que la convocatoria de huelga de mañana jueves, 29 de marzo, se produzca «a 60 días» de la llegada de un nuevo gobierno y después de que «hayan estado tres años soportando como el paro llegaba a más de cinco millones».
Grisaleña, que hizo estas declaraciones minutos antes de reunirse con el presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, señaló que respeta la convocatoria de huelga porque es un derecho recogido en la Constitución pero espera que «se permita también que el que quiera trabajar lo haga libremente».
El presidente de la Patronal destacó que en la convocatoria de huelga no se recoge «ningún argumento contra algo del empresario», lo que es un ejemplo «de que se trata de motivos políticos», insistió.
Rechazo parlamentario
Por otra parte, y con el voto en contra del PP, el Parlamento de Canarias ha aprobado una iniciativa del Grupo Socialista que ha pedido al Gobierno regional que negocie con el Ejecutivo de Mariano Rajoy para “dejar sin efecto el Real Decreto-Ley 3/2012, de 10 de febrero, de medidas urgentes para la reforma del mercado laboral”.
Además, se considera necesario que el Ejecutivo central “restablezca el equilibrio en las relaciones laborales, con respeto absoluto a la negociación colectiva y a los elementos sustanciales de la misma”.
Asimismo, y a propuesta del Grupo Mixto, se pide al Ejecutivo regional que convenza al gabinete de Rajoy para “negociar una reforma laboral con los agentes sociales y las fuerzas políticas de las Cortes” con el fin de que la misma tenga como objetivo “la estabilidad en el empleo y no facilitar el despido”.
Todo ello junto a la petición de un Plan extraordinario de estímulo económico porque, tal y como explicó el portavoz de Nueva Canarias (NC) en el Mixto, Román Rodríguez, “la reforma laboral no crea empleo sino la reactivación de la economía”.
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