AGENCIAS.-El diputado de MÉS, David Abril, ha lamentado este martes la sentencia del Tribunal Supremo (TS) que avala las prospecciones petrolíferas en Canarias por ser, además, «una muy mala noticia para Baleares».
Para el parlamentario esta sentencia conforma «un muy mal precedente como ya lo fue la declaración de impacto ambiental (DIA) favorable emitida por el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente hace poco más de un mes».
«Si eso es lo que piensa el TS, alegando motivos de legalidad, lo que hay que hacer es cambiar las leyes», ha afirmado Abril, quien ha instado al Govern a impulsar con la Comunidad de Canarias un ‘frente común’, «que permita cambiar un marco normativo que ampara los intereses de las multinacionales de la energía por encima de los pueblos», ha concluido.
Soria
Por su parte, el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, considera que el dictamen del Tribunal Supremo acerca de las prospecciones en Canarias es uno los condicionantes para que las prospecciones en Canarias puedan seguir adelante.
«Si se recurriera al Supremo, pero se cumplen los criterios básicos, esas prospecciones irían adelante, si así lo establece el Supremo», afirmó esta mañana el ministro en un desayuno organizado por ‘Cinco Días’.
Soria realizó estas consideraciones antes de que se supiese que el Alto Tribunal ha avalado las prospecciones en Canarias y rechazado los siete recursos presentados contra el real decreto de 2012 que las facilitaban. Las sentencias se conocerán en los próximos días.
Con esta decisión, el Supremo confirma la validad de una norma en la que se aprobaron los permisos de investigación de hidrocarburos denominados ‘Canarias-1’, ‘Canarias-2’, ‘Canarias-3’, ‘Canarias-4’, ‘Canarias-5’, ‘Canarias-6’, ‘Canarias-7’, ‘Canarias-8’ y ‘Canarias-9’.
«Nos quejamos de la dependencia energética y la crisis de Ucrania, pero parece que nos seguimos resistiendo a investigar recursos naturales que disponemos», señaló Soria, antes de indicar que «muchas comunidades no solo expresan su negativa a que haya prospecciones, sino que incluso están legislando en contra».
También antes de que se conociese esta decisión, el el presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha indicado que el proyecto de Canarias se encuentra a 60 kilómetros de Lanzarote y Fuerteventura y «tiene teóricamente todas las garantías de que no va a pasar nada, como no pasa en todos los pozos exploratorios».
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