En la misma jornada en la que conocíamos que Luis Bárcenas estuvo evadiendo dinero a Suiza mientras era tesorero del PP la ministra de Sanidad y Servicios Sociales filtró un informe del Tribunal de Cuentas que señala que el gobierno del Estado destinó a las comunidades autónomas 140 millones de euros para dependientes que ya habían muerto.
Esto no significa que las familias de 30.000 fallecidos se llevaron el dinero en nombre de los muertos. Eso no es lo que dice el Tribunal de Cuentas. Lo que se dice es que a las comunidades autónomas llegó dinero del Estado que iba destinado a personas fallecidas pero esos gobiernos autónomos en muchos casos no llegaron a dar el dinero a los ciudadanos, al comprobar los datos empezaron a devolverlo al Estado.
Pero vaya usted a explicar todo esto en un titular. No. No hace falta. La noticia del falso fraude venía de maravilla a algunos periódicos voceros del gobierno que no tenían ninguna ganita de hablar en sus portadas del millonario fraude que hizo una sola persona: los 22 millones que Bárcenas evadió a Suiza mientras era tesorero del PP y tenía despacho en la misma sede que Ana Mato y Mariano Rajoy. Eso si que fue un gigantesco fraude al Estado, uno solito 22 millones.
Por si alguien no se ha enterado, el gobierno del PP quiere cargarse la ley de Dependencia. Desde que Mariano Rajoy llegó a la Moncloa se están estudiando fórmulas para convertir un sistema público que protegía derechos en un reparto de (cada vez menos ) dinero público a servicios privatizados. Lo denunció en una entrevista en La Ventana de Canarias en la SER el presidente de la Asociación de Gerentes y Directores de Servicios Sociales. José Manuel Ramírez dijo que el gobierno del Estado quiere demonizar a las personas dependientes y a sus familiares. Cuanto más se extienda una imagen negativa de la conocida como Ley de Dependencia, más se prepara el terreno para desmontar el sistema público y abrir las puertas a empresas de servicios sanitarios privados. En esa misma entrevista Ramírez cuenta que la gestión de la Ley de Autonomía personal por parte del gobierno canario sigue siendo un desastre, a pesar de que el ya exviconsejero Melchor Núñez se apresuró a utilizar la noticia los “defraudadores muertos” para decir en facebook que aquí el gobierno del Mencey lo ha hecho tan bien que somos la tercera comunidad con menos muertos que engañan. Arráyese un millo, exviceconsejero.
Me imagino la indignación de las miles de familias que vieron morir a sus seres queridos mientras esperaban las ayudas a las que tenían derecho por la ley pero que nunca les llegó. Ahora se encuentran con un gobierno que filtra un informe antes de que llegue al Parlamento para dar una imagen de defraudadores a los sectores sociales más débiles. Y le toca controlar los próximos fraudes y todo el dinero público ni más ni menos que a Ana Mato, que veía un Jaguar en el garaje de su casa y no sabía lo que había pagado su marido por él. El ahora exmarido de Mato, Jesús Sepúlveda, fue imputado en la trama Gurtell y unos informes policiales recogieron que los corruptos de esta trama pagaron un viaje a Suiza al matrimonio. A lo mejor el equivocado soy yo, y Ana Mato eligió un buen día para filtrar es e informe que habla de los “muertos” defraudadores. Con eso le hizo un favor a Bárcenas, un golfo que está vivito y defraudando mientras su partido mira para otro lado. Hay que joderse.
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