ACN PRESS.-El presidente del Partido Popular (PP) en Canarias y ministro de Industria, José Manuel Soria, recuerda que su partido continúa a la espera de que el Partido Socialista Canario (PSC) se decida a abandonar el pacto de gobierno que mantiene con Coalición Canaria (CC), y formar una nueva mayoría parlamentaria que le permita gobernar Canarias.
Para el líder de los populares, «Canarias vive una situación de la que podría salir aprovechando las enormes fortalezas que tenemos, que son muchas más que las debilidades». Pero «el problema es que tenemos un Gobierno que está grogi, sin iniciativa, sin rumbo, sin ilusión, solo hace falta escuchar cada día las declaraciones del presidente, para ver que no tiene ilusión de ningún tipo en lo que está haciendo».
Soria, en una entrevista en el programa El Drago de la Cadena Ser, aseguró que el Gobierno canario carece de «iniciativa», está «desacreditado y es un gobierno victimista». Y lo que «tiene que empezar a decir es qué puede hacer por Canarias».
Insistió en que «la inmensa mayor parte de los militantes del PSC desean un cambio en el Gobierno canario», y este «no puede ser liderado más que por el PP por una razón, la más importante, ganamos las elecciones». Otra razón, según Soria, es que «difícilmente el cambio puede venir liderado por un partido como CC que lleva gobernando en las islas más de 20 años».
La nueva mayoría tendría que estar formada por PP-PSC, que suman los diputados necesarios para formar «una mayoría sólida en el Parlamento canario». El problema, según Soria, es que «el secretario general de los socialistas, José Miguel Pérez y algunas personas dentro del Gobierno temen que con un pacto de esa naturaleza puedan perder posiciones».
Políticas audiovisuales
El ministro de Industria criticó el resultado del concurso de concesión de licencias de radio y la gestión de la Radiotelevisión Canaria. Soria afirmó que «hay que cambiar mucho» porque «se utilizan determinadas facultades de un Gobierno para hacer política en el peor sentido del término, política de vuelo raso, para beneficiar a unos sí y otros no, como se ha hecho en el concurso de las licencias de radio».
Respecto a este concurso insistió en que «se ha hecho muy mal», proque «se anunció el resultado de la adjudicación, y cuando se dieron cuenta del desaguisado, estuvieron un año sin comunicarlo oficialmente esperando que Fomento les resolviera la papeleta mediante el socorrido artilugio de aumentar todavía más el número total de emisoras para contentar a todos». Pero el espectro radioeléctrico «es uno solo, no es un chicle que se pueda estirar».
Por ello, justificó, «no se pudo atender esa petición que se basaba exclusivamente en un muy negativo proceso de adjudicación».
Prospecciones
Asimismo,acusa al presidente canario, Paulino Rivero (CC), de antenponer sus intereses «personales y políticos» a los de las islas, oponiéndose a las prospecciones petrolíferas. El presidente del Ejecutivo regional «ya se ha mostrado en distintas ocasiones partidario públicamente de las prospecciones», afirmó en una entrevista en el programa El Drago de la Cadena Ser, pero ahora «ha ido en contra de su convencimiento, solo porque su conveniencia personal y política era ser a ultranza presidente de Coalición Canaria en el Congreso Regional que tienen de aquí a poco».
Soria llega a esta conclusión tras analizar que Rivero, para alcanzar este objetivo, «ya sabía que no tenía apoyos en la isla de El Hierro, después que AHI ha roto con CC; La Gomera, tampoco». En La Palma, prosiguió, «solo tiene los apoyos de aquellas personas que tiene en su Gobierno, pero la mayor parte del partido la controla Antonio Castro que no da apoya que Paulino Rivero sea presidente». En Gran Canaria, «CC ha desaparecido desde hace varios años, y qué decir en Tenerife, donde personas como Oramas, Melchior o Hermoso le dicen que no se presente a presidente».
El dirigente popular asegura que a Rivero «sólo le quedaba Lanzarote y Fuerteventura, y como tenía esa especie de obsesión de presidir CC lo fío todo al petróleo». Pero «al final es también Lanzarote y Fuerteventura, sus compañeros, los que le han dejado tirado, y tampoco lo dejan presentar». En su opinión «cuando alguien es absolutamente incoherente con aquello que públicamente ha dicho y ha manifestado, acaba pagando las consecuencias».
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