Elblogoferoz. Los vecinos de la céntrica calle Serrano de Santa Cruz ya están más que acostumbrados y de vez en cuando se lo recuerdan al alcalde, José Manuel Bermúdez, que también es vecino de la misma y sufre, como todos, los colapsos de tráfico y las pitas de los vehículos ligeros, y el ruido de los pesados, como las guaguas de Titsa, que pasan durante casi todo el día.
Esta tarde, pasadas las 14:00 horas, una guagua de gran tamaño de la empresa insular de transportes no pudo maniobrar para salir de la calle Serrano e incorporarse a la calle Ramón y Cajal, y de ahí a las Ramblas.
Una furgoneta de alquiler estaba aparcada justo en la esquina, imposibilitando la maniobra hacia la derecha, por lo que su conductor paró el motor, avisó a su central y se dispuso a esperar a que llegara el rescate.
Pasados unos cuarenta minutos llegó la grúa municipal, y poco después un policía municipal, a tiempo para sancionar el vehículo y ver cómo la larguísima cola de coches y guaguas empezaba a fluir, una vez retirado el vehículo infractor, con unos conductores con caras de pocos amigos y de no hacer comido. Eran las 15:00 horas de esta tarde de jueves.
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